En Barros Blancos están finalizando obras viales, que se ejecutaron entre los meses de setiembre y diciembre de este año. El tratamiento bituminoso se extiende a lo largo de las calles Los Paraísos y Centenario, importantes vías conectoras entre la Ruta 8 y la calle Ventura, lo que trae aparejado el fácil acceso a Ruta 101.
La extensión de la obra es de aproximadamente dos kilómetros y abarca drenajes, limpieza de cunetas, colocación de caños, alcantarillas, recargo con tosca y un tratamiento bituminoso con riego de niebla. Esta obra se enmarca en el Fondo de Incentivo a la Gestión de los Municipios (FIGM) definido por el Municipio de Barros Blancos con una inversión que ronda los $ 22.000.000.
Desde la Dirección General de Obras del Gobierno de Canelones, el Encargado de la Unidad Ejecutora 3A, Ing. Juan Pablo Pereira, informó que las primeras intervenciones surgieron en el año 2021, cuando se realizaron trabajos hidráulicos en la calle Arazá y en una cañada que cruza el barrio. “Esta zona es muy compleja desde el punto de vista de inundaciones; eso nos ha ayudado porque sabemos que son cursos de agua que hay que mantener rutinariamente”, puntualizó. Dadas las lluvias acaecidas en enero de este año, donde los hogares se vieron afectados por el agua que se acumuló en la calle, en veredas y cunetas, se ha venido trabajando en la limpieza oportuna de los desagües, según lo dispuesto por el municipio local. “Las lluvias del año 2022 fueron de muchos milímetros en poco tiempo, lo que genera distorsiones. Por suerte no entró en las viviendas pero sí estuvieron bastante cargadas las cunetas. Esto comenzó en el año 2021 y continuó en el 2022, dentro de este plan que lleva el municipio adelante”, finalizó.
Pereira agradeció a la población por su paciencia durante el transcurso de la obra, ya que los trabajos conviven con el normal funcionamiento del barrio. “Sabemos que todas las obras generan inconvenientes pero los beneficios a futuro son bastante importantes”, consideró. En estas dos calles transitan muchos vehículos y los problemas generados por la tosca en suspensión eran cotidianos. “Estas calles tenían tosca volando y contaminando a los vecinos y era un reclamo que hace tiempo se tenía. Con esto conseguimos que el polvo disminuya notoriamente”, agregó.
El tratamiento bituminoso está dispuesto para el tránsito liviano. Por allí no deben circular vehículos de alto porte para preservar su correcto mantenimiento. La empresa adjudicada a realizar los trabajos fue CVC, quienes están finalizando las obras actualmente.